Es una operación que, dada su complejidad, requiere de un análisis exhaustivo. Diferencias entre aficionados y los grupos de especialistas.
El Bitcoin, la criptomoneda más fuerte de las que ofrece el mercado digital, mostró en lo que se lleva operado desde 2020 un alto nivel de fluctuación en su precio, que sólo una vez superó la barrera de los 10.000 dólares, en febrero, aunque siempre estuvo lejos del pico de cotización que se dio a fines de 2017, cuando rozó los 20.000 dólares por unidad. De este modo, y por la complejidad que requiere la operación, se generan dudas respecto de la conveniencia de minar bitcoins en este momento.
Incluso esta criptomoneda tuvo una caída pronunciada coincidente con la declaración de pandemia por el coronavirus, tanto que el 16 de marzo bajó de los 6.000 dólares (5.740). ¿Cuánto vale un Bitcoin? Su cotización depende del movimiento diario de mercado, aunque como referencia se toma que tuvo un repunte en los primeros días de abril, cuando volvió a estar cerca de los 7.000 dólares.
El techo de la cotización se dio en el 17 de diciembre de 2017, cuando alcanzó los 19.780 dólares por unidad y comprar bitcoins era un furor. Claro que en los meses siguientes sufrió un fuerte desplome, producto de variables diversas: rumores de que Corea del Sur preparaba su propia criptomoneda, robos de bitcoins a través de hackeos informáticos y, finalmente, la prohibición de que pueda ser publicitado en Google, Facebook y Twitter.
¿Qué es minar bitcoins?
Minar es el proceso a través del cual Bitcoin y otras criptomonedas son creadas. La minería se realiza a través de redes descentralizadas de individuos, ya sea trabajando solos o en grandes grupos. Existen dos propósitos de minar bitcoins: crear más monedas y confirmar la validez de las transacciones usando monedas que ya se encuentran en circulación.
Las transacciones realizadas con Bitcoin son agrupadas en “bloques”, los cuales son verificados periódicamente por mineros. Existe un incentivo financiero para éstos en el acto de verificar las transacciones, para lo que realizan mediante la resolución de ecuaciones complejas en sus computadoras. Verificar un bloque les provee de una cierta cantidad de “nuevos” bitcoins, además de ganar una tarifa de la transacción.
Técnicamente cualquiera puede minar, pero los especialistas sostienen que en la actualidad aumentó tanto la complejidad de las ecuaciones con bitcoins que hay que hacer un análisis muy minucioso de la forma en que se desarrollará dicha operación. Por esta razón, los mineros forman ahora grandes grupos conocidos como “pools” para combinar la potencia minera de sus computadoras.
Debido al algoritmo de Bitcoin, muchas computadoras trabajando en conjunto tienen mejores probabilidades de resolver las ecuaciones de forma rápida y ganar dinero, mientras que se mantienen los costos bajos. Estos pools incluso evolucionaron hasta convertirse en entidades de consumo, en las que usuarios regulares pueden unirse por una tarifa.
Hay otras criptomonedas nuevas, que tienen además algoritmos a Bitcoin, que aún son capaces de ser minadas solo con una computadora personal. Sin embargo, las ganancias pueden ser pequeñas y pueden borrarse debido a las fluctuaciones en el valor de la moneda.
Además, hay que tener en cuenta que las criptomonedas más nuevas son propensas a la volatilidad extrema. Incluso si hace un ingreso significativo un día, éste se puede evaporar fácilmente al día siguiente y la rentabilidad potencial se habrá convertido en pérdida.
El hardware requerido para minar depende del objetivo. Si se está buscando hacerlo con una prueba de participación (proof-of-stake), entonces se puede apelar a un equipo de uso hogareño. Se puede decir lo mismo de las diversas altcoins, aunque dependiendo del algoritmo de minería, puede que no siempre sea el caso. El caso de Bitcoin, entonces, es mejor dejárselo a los profesionales en este momento.
Si desea obtener ganancias más grandes, puede comprar un hardware de minería de ciertas compañías. Este es conocido como una “plataforma” y generalmente es bastante costoso, por lo que debería calcular los costos necesarios para ejecutar uno de estos, así como su precio de compra, con el fin de ver si verdaderamente le producirá un beneficio. Factores como el precio de tu electricidad son aspectos importantes a considerar.
También puede contratar un hardware que sea propiedad de una compañía, el cual minará a nombre suyo. Esto se conoce como cloudmining y puede ser mucho menos complicado que comprar equipos por su cuenta. Sin embargo, sus ganancias serán probablemente más pequeñas en el largo plazo.
En los próximos años, todos los bitcoins disponibles habrán sido minados. Esto significa que el único incentivo que tendrán los mineros para procesar los bloques de transacciones serán los honorarios de la transacción, que serán más altos. Por ende, las transacciones cuyos usuarios hayan ofrecido la tarifa más alta se procesarán primero, como es el caso ahora. El fin de la minería de monedas significa también que Bitcoin finalmente se convertirá en una moneda deflacionaria.
Aun cuando en China es donde se radicaron los mayores mineros, debido a las prohibiciones se fueron asentando en diferentes partes del mundo, entre ellas Estados Unidos.
Qué es un bitcoin
Una criptomoneda es una moneda digital diseñada para funcionar como medio de intercambio. Utiliza la criptografía para asegurar y verificar transacciones, así como para controlar la creación de nuevas unidades de una criptomoneda particular.
Esencialmente, las criptomonedas son entradas limitadas en una base de datos que nadie puede cambiar a menos que se cumplan condiciones específicas. Existen miles de criptomonedas, la más popular es Bitcoin.
A principios de 2009, un alias, “Satoshi Nakamoto”, presentó Bitcoin, que fue descripto como un “sistema de efectivo electrónico de igual a igual”.
Cada transacción es un archivo que consta de las claves públicas del remitente y el destinatario (direcciones de billetera) y la cantidad de monedas transferidas. La transacción también debe ser firmada por el remitente con su clave privada y finalmente es transmitida a la red una vez es confirmada por sus usuarios dedicados a esta tarea, los denominados “mineros”.
Dentro de una red de criptomonedas, solo los mineros pueden confirmar las transacciones resolviendo un rompecabezas criptográfico. Toman transacciones, las marcan como legítimas y las difunden a través de la red. Después, cada nodo de la red lo agrega a su base de datos. Una vez que se confirma la transacción, se vuelve irrefutable e irreversible y un minero recibe una recompensa económica: una cantidad de BTC.
En esencia, cualquier red de criptomonedas se basa en el consenso absoluto de todos los participantes para darles legitimidad a los saldos y transacciones. Si los nodos de la red no están de acuerdo en un solo saldo, el sistema básicamente se rompería. Sin embargo, hay muchas reglas preconfiguradas y programadas en la red que evitan que esto suceda.
Las criptomonedas se denominan así porque el proceso de mantenimiento del consenso está asegurado con una fuente criptografía.
Actualmente hay muchos comerciantes que aceptan Bitcoin como forma de pago. Estos vendedores van desde minoristas en línea como Overstock y Newegg hasta pequeñas tiendas locales, bares y restaurantes. Los Bitcoins se puede utilizar para pagar hoteles, vuelos, joyas, aplicaciones, partes de computadoras e incluso un título universitario.
Otras monedas digitales como Litecoin, Ripple, o Ethereum, entre otras, aún no son tan ampliamente aceptadas. Sin embargo, hay cambios: Apple autorizó al menos 10 diferentes criptomonedas como una forma viable de pago en su App Store.
Los usuarios de criptomonedas que no sean Bitcoin siempre pueden cambiar sus monedas por BTC. También hay sitios web de venta de tarjetas de regalo o gift cards como Gift Off, que acepta alrededor de 20 criptomonedas diferentes. A través de las tarjetas de regalo, básicamente puedes comprar cualquier cosa con una criptomoneda.
Fuente: https://www.clarin.com/economia/-como-minar-bitcoins-es-rentable-en-2020-_0_2PuvTDQqh.html
