Los inversores apuntan a los mercados que más caen para aprovechar algunos “precios de saldo” y apostar a un repunte.
Las opciones van rotando. Los inversores se preparan, cuando se trata de la Bolsa, para comprar los papeles que más bajaron y tenerlos en su poder por tiempo indefinido. Saben que cuando las empresas, particularmente los bancos, recuperen su valor histórico, algo que puede tardar unos años, la ganancia puede superar 500% en dólares. En otras palabras, compran acciones para tenerlas en el freezer y descongelarlas cuando llegue la oportunidad. Otra parte de los compradores, lo hace porque tienen precios de saldo y las venderán a corto plazo para tomar la ganancia.
Por eso el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, que bajó más de 40% en dólares en lo que va del año, renació con una suba de 5,91% después de varias ruedas de decadencia.
El monto de negocios creció 40% y se operaron $ 730 millones. La suba la encabezó Banco Macro (+10,06%), seguido por Supervielle (+8,21%), BBVA (+8,14%) y Galicia (+7,21%). Transportadora Gas del Sur, uno de los papeles más castigados, aumentó 7,42% y cotizó a $ 90,50. El 9 de agosto, ese papel valía $ 143,50.
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en Wall Street- también tuvieron una buena rueda, Las preferidas fueron Banco Macro (+6,53%) y Cresud (+6,12%). El otro banco que se destacó fue Galicia con 4,27%.
El dólar oficial no tuvo grandes variaciones. El mayorista con negocios por $ USD 251 millones, necesitó de la intervención del Banco Central que compró USD 60 millones para evitar que cierre con una baja más profunda. Al cierre, finalizó tres centavos abajo a $ 59,89. En bancos y casas de cambio, subió 4 centavos a $ 62,94 debido a la mayor demanda de dólares del cupo de USD 200 por personas, de parte de los que cobraron su sueldo.
Los que se dispararon son los dólares alternativos. El contado con liquidación aumentó $ 1,70 a $ 76,17 y el dólar Bolsa o MEP, anotó un alza de $ 1,49 a $ 73,69. En la plaza marginal el dólar libre recuperó 50 centavos y terminó la rueda a $ 69. Las reservas del Banco Central crecieron apenas USD 5 millones a 43.752 millones.
El dato importante para la Argentina que está atrapada en el precio de los combustibles y las tarifas, es la fuerte suba del petróleo Brent en el mundo, que sirve de referencia local, de 3,62% por la menor cantidad de stock de los Estados Unidos y por la proximidad de la reunión de la OPEP donde los países asociados están dispuestos a restringir los cupos para que el precio aumente. El movimiento puede ser una buena noticia para Vaca Muerta, pero mala para los consumidores y para la inflación argentina si el próximo Gobierno se decide a no quedar afuera del mapa internacional en cuanto a la explotación y recuperación de sus reservas de gas y petróleo.
Por su parte, los bonos tuvieron un comportamiento alcista en los de largo plazo que son los que definen el riesgo país. El Discount en dólares con ley de Nueva York subió 2,15% y el Par en dólares lo acompañó con 1,11%. La suba de los bonos de Estados Unidos, impidió que este avance se traslade a pleno al riego país que bajó apenas 47 unidades a 2.359 puntos básicos.
Los plazos fijos con tasas por debajo de la inflación y las cauciones de la Bolsa que pagan poco más de 40% reflejan que sobran pesos y que la gente no los demanda lo que muestra un escenario peligroso para emitir. La emisión sirve solamente cuando la gente desea tener pesos en su poder. Hoy, todos se vuelcan al dólar y los van cambiando a medida que necesitan hacer pagos.
La restricción cambiaria ha hecho revivir a los mercados alternativos del dólar y son los que los inversores siguen con más interés. Son apuestas que dan buen resultado en las crisis. Por eso, la brecha con el oficial se agrandó a 24%.
