El Central suma en mayo u$s 210 millones, debido a que la adquisición de divisas en el mercado mayorista apenas compensa la salida por energía, pago de deuda y demanda de importadores
El ingreso de dólares por liquidación de exportaciones, en particular del agro, permitió al Banco Central recuperar reservas por unos u$s 1.200 millones en abril, por la favorable liquidez de divisas en el circuito financiero, que tiene su pico en el segundo semestre del año.
Después de caer u$s 3.592 millones entre enero y marzo, las reservas repuntaron en abril unos u$s 1.213 millones, hasta los 28.220 millones de dólares. Este ritmo de acumulación de activos no se pudo sostener en mayo: según datos provisorios de la entidad, los activos internacionales avanzaron hasta el jueves apenas 210 millones de dólares.
Además, las compras del Central en el mercado interbancario o mayorista cayeron a menos de la mitad en mayo respecto de abril. En las tres primeras semanas de este mes acumularon u$s 870 millones, contra u$s 1.990 en el mismo lapso de abril.
El jueves, la autoridad monetaria adquirió en el mercado mayorista unos u$s 120 millones, mientras que redujo las autorizaciones de compra de divisas a importadores, práctica habitual desde la devaluación de enero, para concentrar la demanda y aprovechar las fuertes liquidaciones del agro. Esta compra fue la tercera mayor de mayo, después de los u$s 180 millones del día 8, y de u$s 140 millones del día 6.
En el inicio de la jornada cambiaria circularon versiones acerca de una restricción total de las autorizaciones del Banco Central para compras de divisas por importaciones. Fernando Izzo, de ABC Mercado de Cambio, dijo a Infobae que "no es así, se estuvo operando igual, aunque con menor volumen".
La intervención del Banco Central finalizó con un contundente saldo positivo para reforzar la posición de reservas, aunque en los balances diarios sólo una porción minoritaria ingresa a los activos: la mayor parte de estos dólares se destinan al pago de deuda y de importaciones de energía a cuenta de Enarsa e YPF. El déficit energético convirtió al Estado argentino en el principal importador de la economía local. La otra cara de la moneda es que son las importaciones del sector privado las que se perjudican con restricciones oficiales.
La pulseada cambiaria
"En realidad, lo que hizo el Banco Central hoy fue autorizar menos operaciones grandes, pero esta es una situación que se da todos los días. La autoridad monetaria debe convalidar todas las operaciones de compra de divisas en el mercado interbancario cuando superan los 300 mil dólares,24 horas antes de que se efectivicen", indicaron desde ABC Cambio.
Cuando la operación del importador es autorizada, éste da aviso al banco con el que opera, pues es la entidad la que compra los dólares, en un mercado abastecido básicamente por los exportadores y, en última instancia por el propio BCRA y el Banco Nación cuando escasea la liquidez.
Además del permiso del Banco Central, los importadores deben contar previamente con una autorización de la Secretaría de Comercio para sus operaciones. Esta doble traba administrativa posterga u obliga a reprogramar transacciones de comercio exterior, lo que da aire al Banco Central para tomar del mercado la mayor cantidad posible de dólares.
Fuentes de la plaza cambiaria estimaron que el ritmo de liquidación de exportaciones se mantiene firme en el período de la cosecha gruesa. Las cerealeras e industrias derivadas rinden ventas en el exterior a un promedio superior a los u$s 130 millones diarios. "Cuando los exportadores aflojan, se le complica al Central sumar reservas y se restringen las ventas a importadores particulares", añadieron.
La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) señalaron que el agro liquidó hasta el 16 de mayo un récord de 9.442,6 millones de dólares.
Por otra parte, la necesidad de dólares de empresas que requieren de piezas, insumos y artículos terminados para mantener el ritmo de producción impide al BCRA monopolizar las compras en el mercado mayorista, o bien que la autoridad monetaria restrinja más las autorización para importar, por las consecuencias recesivas de este "torniquete" a las divisas.
En ese aspecto, es llamativo el volumen de compras del BCRA, que en 14 ruedas cambiarias de mayo cayó un 56% respecto de abril. El mes pasado, el saldo promedio a favor de la entidad fue de u$s 142 millones, contra u$s 62 millones en mayo.
