El inicio de la semana mostró bajas de dos dígitos en papeles financieros y energéticos, junto con fuertes retrocesos en la deuda y subas en los precios de la divisa
La operatoria de este lunes se desarrolla en un clima de alta tensión para los mercados financieros argentinos, luego de la derrota electoral del oficialismo en la Provincia de Buenos Aires. Los movimientos del día reflejaron un ajuste inmediato en el dólar minorista y mayorista, en un rango próximo a 5 por ciento, mientras que Wall Streetmarcó bajas generalizadas en los ADR argentinos y la plaza local en Buenos Aires operó con fuertes descensos en el S&P Merval, de 12% en pesos a las 14:50 horas. Los bonos Globales regidos por la Ley de Nueva York también mostraron caídas significativas en las primeras horas de la rueda.
Además, el desplome de los títulos públicos en dólares incrementó el riesgo país de Argentina a la zona de los 1.000 puntos básicos por primera vez desde el 24 de octubre de 2024.
En el mercado mayorista, las operaciones se registran posturas en $1.401, tras haber operado en un máximo de 1.450 pesos y cerca de el techo de la banda de libre flotación, en los 1.475 pesos. El ajuste inicial del tipo de cambio formal acompaña el nuevo contexto político tras las elecciones provinciales.
La atención también se centró en el desempeño de los papeles argentinos en Nueva York. Con la apertura de Wall Street, los ADR profundizaron las pérdidas en medio de un escenario marcado por ventas en bancos y energéticas. Grupo Galicia resta 17,4%; Banco Francés, un 19,9% y Banco Macro, un 20,7 por ciento. Los papeles de YPF retroceden un 13,7% en Nueva York, a 26,60 dólares.
“Estos resultados parecen aumentar la probabilidad de un escenario bajista central en el que el mercado cuestiona la posibilidad de que continúen las reformas y aumenta la incertidumbre en torno a las futuras fuentes de financiamiento externo”, comunicó a sus clientes Morgan Stanley en una nota.
Más allá de que el propio Milei reconoció la derrota, ratificando el rumbo económico pero asumiendo cambios políticos hacia las legislativas en todo el país a finales de octubre, sorprendió el diferencial de unos 13,7 puntos en los cómputos finales provinciales, un bastión del opositor partido peronista.
“Con el resultado electoral es más probable que el Gobierno redoble la apuesta antes que un cambio de gabinete o políticas. Por tanto, es de esperar que haya más intervención en el dólar, futuros y suba de tasas. La transición a octubre promete ser turbulenta”, aventuró Roberto Geretto, analista de Adcap Grupo Financiero.
Sostuvo que “si bien cambiar el rumbo económico no es fácil, seguir igual tiene sus costos, donde probablemente el Gobierno tenga que usar más reservas y tasa de interés. Pasada la tormenta, el resultado del domingo hace que post octubre haya altas chances de un cambio en la política monetaria y cambiaria”.
“El mercado no esperaba un desempeño tan bueno del peronismo”, señaló la consultora en economía y estrategia 1816. “Parece inexorable que tendremos presión sobre el tipo de cambio y descensos en los precios de bonos y acciones. El Gobierno, que esperaba otro resultado, se verá obligado a recalcular”, advirtió.
“La aplastante victoria peronista en las elecciones intermedias de la provincia de Buenos Aires indica una prima de riesgo político prolongada” para Argentina, afirmó un reporte del banco JP Morgan.
El riesgo país supera los 1.000 puntos básicos
La brecha de tasas entre los títulos públicos de Argentina en dólares vuelve a incrementarse respecto de las emisiones soberanas de los EEUU, lo que determina el llamado riesgo país. En este sentido, el diferencial de rendimientos del Global 2035 (GD35, en 14,4% anual en el mercado secundario) con el bono del Tesoro de los EEUU a diez años (4,06%) alcanzaba los 1.034 puntos básicos.
Por el lado de los bonos soberanos Globales, el Global 2029 (GD29) caía 5,8% hasta 72,89 dólares, el Global 2030 (GD30) descendía 6,9% hasta 68,50 dólares, mientras que el Global 2035 pierde 8,7%, a 56,21 dólares.
Los operadores remarcaron que, con el correr de la rueda el volumen de transacciones en bonos tomó mayor consistencia, lo que permitió observar con más claridad el impacto en la deuda tras el resultado electoral.