La Bolsa porteña rebotó 8% y quedó cerca de los 32.000 puntos. El crudo recuperó 11% y el ADR de YPF saltó 16%, a USD 6,08. El Riesgo País cerró por encima de los 2.800 puntos
Con un importante sprint final, Wall Street cerró con una amplia ganancia de 4,9%, que permitió una momentánea tregua a los castigados precios de acciones y bonos. El impulso lo dio desde el inicio la recuperación de 11% en el precio del petróleo.
La jornada se manifestó muy volátil y al mediodía el índice Dow Jones de Industriales llegó a pasar a negativo, aunque terminó la ronda de negocios por encima de los 25.000 puntos.
Para la Argentina, el empuje alcista llegó cuando más se lo precisaba. El panel líder S&P Mevral de ByMA (Bolsas y Mercados Argentinos) anotó una ganancia de 8,1%, hasta los 32.832 puntos, con el papel de YPF a la cabeza (+12,6%).
La petrolera estatal rebotó casi 16% en Wall Street, desde su valor más bajo desde que salió a cotización en 1993, con el ADR en 6,08 dólares.
La recuperación del petróleo fue el sostén de las plazas bursátiles, todavía golpeadas por las cuantiosas pérdidas del “lunes negro”.
El petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este martes con un ascenso del 10,4%, hasta USD 34,36 el barril, en una plaza aún marcada por la crisis del coronavirus y la disputa entre Arabia Saudita y Rusia, en el seno de la OPEP, que llevó al precio del crudo a niveles similares a los de 1991, en plena Guerra del Golfo.
La variedad Brent del Mar del Norte, referencia en Europa y también para la Argentina y Brasil, terminó con un alza de 9,8%, a USD 37,73 el barril con entrega en mayo.
De todos modos está claro que lejos están de disiparse los temores sobre la evolución de la actividad económica global. Ejemplo de esta percepción es que el Índice Vix (Volatility Index) que mide el grado de volatilidad o desconfianza a través de una correlación con el S&P 500 de Wall Street, sigue en un nivel muy elevado de 46,6 puntos.
Las principales bolsas europeas, que habían abierto la sesión en verde después de las fuertes caídas del lunes, fueron descontando ganancias a lo largo de la jornada y cerraron en rojo. Londres cedió un 0,1%; Fráncfort, un 1,4%; París, un 1,5%; Milán, un 3,3%; y Madrid, un 3,2 por ciento.
La operatoria bursátil continuó transcurriendo en un contexto complicado y volátil, tras haber sufrido pérdidas históricas por la expansión del coronavirus en el mundo y en las últimas ruedas por la oscilación de los precios del petróleo. Incluso el Dow Jones llegó a operar negativo al mediodía.
Después de conocerse el decreto del Gobierno argentino que habilita la reestructuración de bonos emitidos con legislación extranjera, en el plano local, el Riesgo País de Argentina cerró por encima de los 2.800 puntos por primera vez desde junio de 2005, cuando el país salía del default.
A diferencia de lo que ocurrió con la renta variable, la iniciativa oficial bloqueó una posible recuperación de los títulos de renta fija. Los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) finalizaron con una merma promedio del 0,6%, tras un inicio alcista, y luego de caer un 7,5% en la sesión anterior.
Matías Roig, director de Portfolio Personal Inversiones, explicó que “lo que tiene que demostrar el país para lograr una renegociación aceptable son sus números hacia el futuro; entonces, si los commodities bajan será más difícil para la Argentina convencer a los acreedores de que va a tener un sendero de crecimiento y baja de déficit fiscal, y poder cumplir con los objetivos macro que quieren poner”.
A través de un decreto publicado en el Boletín Oficial, el presidente Alberto Fernández autorizó la reestructuración de una parte de la deuda pública por USD 68.842 millones, al tiempo que delega al ministro de Economía, Martín Guzmán a efectuar la renegociación con los acreedores.
Para las emisiones en dólares el cierre fue mixto, con paridades que oscilaron entre los 35 y los 57 dólares por lámina de 100.
“Que las cotizaciones de los bonos hayan ensayado un rebote resulta positivo dado que vuelve a acercar las paridades al 40%, un nivel crítico dado que por debajo del mismo podrían colarse peligrosos ‘fondos buitre’ en la renegociación”, explicó el economista Gustavo Ber.
“Su eventual ingreso podría obligar a las autoridades a acelerar y mejorar las condiciones de la oferta, ya que caso contrario se corre el riesgo de no alcanzar los desafiantes niveles de aceptación de las cláusulas de acción colectiva”, añadió Ber.
Debido al “cepo” al dólar, el mercado cambiario se mantuvo aislado de los efectos del coronavirus. En la rueda mayorista la divisa de EEUU terminó negociada a $62,59, con un bajo monto operado de USD 183,1 millones en el segmento de contado (spot), y con participación compradora del Banco Central.
En futuros se pactaron USD 44 millones en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) más USD 248,6 millones en el ROFEX. Los contratos para fin de mes terminaron a $64,39, mientras que para fin de abril concluyeron a 66,79 pesos.
Al público el dólar finalizó ofrecido a $84,13 en el promedio de bancos de la City porteña, por la aplicación del impuesto “solidario” del 30 por ciento.
El BCRA liberó este martes unos $58.600 millones, por la renovación parcial de vencimientos de las Letras de Liquidez (Leliq). La entidad monetaria colocó deuda por $73.157 millones a 29 días de plazo, con una rebaja de tasas ahora en el 38%, desde el 40% anual previo.
